Cambio de paradigma (12): El coste de funcionamiento de la ciudad
¿Cuánto cuesta el funcionamiento de la ciudad? ¿Cómo lo pagamos? ¿Estaremos haciendo trampas al solitario?
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- Calidades de urbanización
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- Vivienda en propiedad
- Insolvencias
- El alquiler ausente del urbanismo
- Lo público y lo privado
- El ámbito de actuación
- Gentrificación
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Si nos preguntaran cuanto cuesta construir la ciudad, sabríamos hacer una estimación: superficies blandas a tanto, superficies duras a tanto otro...
Pero, ¿cuánto cuesta el funcionamiento de la ciudad?
Tal vez os extrañe esta pregunta siendo mayoritariamente urbanistas, porque, de ser interesante la respuesta, habría que tratarlo con el interventor del ayuntamiento. Es habitual presuponer que la ciudad se autofinancia y que esta pregunta "no nos afecta". El cambio de foco que comporta la regeneración urbana nos enfrenta ineludiblemente a esta pregunta. La ciudad (al menos la edificación y la urbanización) se ha degradado con el uso, ha sido consumida. ¿La ciudad se autofinancia realmente?
Hemos hecho una investigación casera y para un municipio con un presupuesto, excluidas inversiones, cercano a los 100 M€, la distribución del coste de los servicios podría ser la que refleja la gráfica siguiente (incluyendo para cada servicio la parte proporcional de los gastos generales):
Entrando en el concepto de Espacios públicos o servicios urbanos (lo que podríamos llamar cemento, por contraposición a personas), hemos clasificado los gastos diferenciando tres conceptos: Vialidad y espacios libres, Zonas verdes y Recogida de basuras.
El conjunto de los ingresos ordinarios vinculados al cemento supera ligeramente los costes contabilizados.
Este casi equilibrio entre los costes y los ingresos del cemeno no es del todo cierto, porque los costes considerados no incluyen el mantenimiento propiamente dicho de la ciudad (porque no se hace), es decir que el equilibrio se produce por considerar como gastos únicamente los consumos y las reparaciones, por lo que los ingresos no cubren ni el mantenimiento preventivo o sistemático, ni las amortizaciones.
El urbanismo al que estamos acostumbrados se ha ocupado de la expansión de la ciudad, resolviendo quién paga la primera implantación de la urbanización, pero no ha contemplado quién pagará la reurbanización.
La ciudad creada en los años 60-70 del siglo pasado está agotando su vida útil a consecuencia de su escasa calidad constructiva y de la falta de mantenimiento. Y ahora surge la pregunta del millón ¿quién paga la rehabilitación de la edificación? ¿quién paga la reurbanización? Miramos la caja correspondiente a las amortizaciones de la edificación y la urbanización y resulta que está vacía. Tanto los propietarios de vivienda como los gestores públicos, hemos funcionado como si los edificios y la urbanización fueran eternos y, ante los síntomas de que nada es eterno, es habitual que esta falta de previsión se resuelva pidiendo subvenciones a la rehabilitación y... ¿con la urbanización?
Los vecinos de la noticia que abre este post parece que tienen claro quién ha de pagar la reurbanización: el Ayuntamiento, que con el IBI abusivo que nos cobra da para mantener, conservar y renovar la urbanización e incluso para reducir la recaudación. Pero los números parece que apuntan en sentido contrario.
Solemos cerrar los posts de esta serie haciendo referencia a cómo resuelve la L3R el aspecto comentado, normalmente para destacar lo acertado de sus opciones. En este caso, en cambio, la L3R no aporta ninguna medida. Parece que ha diagnosticado el problema de la falta de aprovisionamiento para financiar la rehabilitación de la edificación y la urbanización, pero se preocupa únicamente de como financiar la próxima reurbanización sin señalar ninguna medida para impedir que se reproduzca el problema.
Habrá que hacer un análisis más riguroso de los costes reales de la ciudad, sin trampas al solitario.
Propuesta: Proyecto colectivo de cálculo de los costes de la ciudad
Es necesario abordar la regeneración de la ciudad existente pero, mucho más importante, debemos establecer las pautas de buena administración que permitan que la gestión de la ciudad sea sostenible.
Por otra parte, el análisis de los costes efectivos de los desarrollos se ha puesto sobre la mesa con la obligación del Informe o Memoria de Sostenibilidad Económica (TRLS 15.4). El estudio doméstico que se comenta en este ost, permite establecer unos costes de funcionamiento de la ciudad de:
- Vialidad y espacios libres: 7,28 €/m²/año.
- Zonas verdes: 1,76 €/m²/año.
- Recogida de basuras: 198,93 €/vvda/año.
Como se ha apuntado ya, el coste incluye los gastos indirectos y no incluye ni el mantenimiento preventivo ni la amortización. Conviene advertir que en el caso de la recogida de basuras, la tasa girada cubre poco más del 60% del coste del servicio.
Os proponemos la realización de un estudio de estos costes a todos los lectores que seáis técnicos municipales o redactores de planeamiento. Para ello, abrimos un Foro sobre metodología de cálculo y aplicación a los municipios en que trabajemos, con la intención de hacer públicas las conclusiones y, si nos juntáramos un número suficiente, señalar costes medios en función del tamaño de la población.
El foro será privado porque parece que nos cuesta mucho salir a cuerpo descubierto. Tanto el alcance del trabajo como el calendario se fijará por los integrantes del foro.
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